Capitulo 29: El Reto del Guardián Felino
Página 1 de 1.
Capitulo 29: El Reto del Guardián Felino
Ninguno de los integrantes del temerario grupo daba crédito a sus oídos cuando Feline lanzó un reto al sorprendido Keidis…
-¿Un juego?-preguntó Keidis, perplejo ante la propuesta…
-¿Eres sordo? ¿O estúpido? ¡Sí, un juego, retrasado!-exclamó el guardián, haciendo que Keidis enfureciera, pero antes de que se abalanzara sobre Feline, Arnes recordó algo…
-¿No era que no se puede abrir una puerta si no te derrotamos?-preguntó al guardián, quien lo miró con sagacidad felina para luego responder.
-No tengo este trabajo solo por el lindo escritorio…que por cierto, no esta nada mal-respondió con sarcasmo-al guardián de las trece puertas se le concede una serie de ventajas, así que yo decido quien pasa y quien no…-
-Bien, entonces ¿Cuál es el reto?-preguntó Keidis, impaciente por pelear.
El guardián se acercó a su escritorio, se agachó y reapareció con un enorme y bizarro lanzamisiles…
-Te disparo con esto en la cara, y si sobrevives, pueden pasar…-la reacción del grupo fue muy predecible, y Feline se echó a reír sonoramente ante esto-¡Jajaja ja! ¡Debieron ver sus caras, no tiene precio!
-¡Tómalo en serio de una vez!-gritaron todos al unísono.
-¡De acuerdo, de acuerdo! ¡Que mal humor!-Feline lo pensó un momento, desenvainó su espada y dijo-Muy bien, si logras quitarme esta espada, entonces pasarán sin que se los impida…-
-¿Eso es todo? No puede ser tan difícil-clamó Keidis, lo que provocó la risa de Feline…
-Si lo logras, la puerta que buscan es la de ahí…-señaló Feline a una puerta unos pasos a su izquierda, Keidis atacó a Feline, pero este se movió muy rápido, sin que pudiera tocarlo, pero además, hizo a Keidis perder el equilibrio, haciéndolo caer al suelo…
-No he dicho que puedes comenzar…-replicó Feline, su oponente se levantó del suelo, esperando a que se preparara a comenzar, Feline lo miró de forma burlona y esperó un momento, luego, levantó su mano y dijo:
-Comencemos…-dijo, y los dos comenzaron a atacar con sus espadas a velocidad de relámpago, Keidis hacía todo lo posible por quitarle la espada a intervalos, pero Feline estaba obviamente jugando con él, no sería nada fácil quitarle el arma que movía a tanta velocidad…
-¡Tormenta de Acero!-Keidis comenzó a atacar con velocidad, pero Feline lo contrarrestó rápidamente…
-¡Ráfaga de Tigre!-La espada de Feline rebasó fácilmente la velocidad de Keidis, pero no lo golpeó ni una vez, sin embargo, si lo hizo perder el balance, momento que el guardián aprovechó para golpearlo y derribarlo, nadie tenía que decirle a Keidis que Feline solo estaba jugando con él.
-No veo como es que pasó por tu mente venir hasta acá…-se burló Feline…-uno diría que hasta un gatito puede vencerte…-
-¡Cierra la boca! ¡Aún no termino!-replicó Keidis, volviendo al ataque con agilidad, pero todo parecía no tener sentido…
Keidis se precipitó y atacó fuertemente al guardián, pero este esquivó y viendo el hueco que Keidis dejó, intentó golpearlo, el demonio cazador se movió a un lado, sosteniendo la espada de Feline bajo su brazo y disparando la pistola que había sacado con velocidad, Feline esquivó la bala, y Keidis estuvo a punto de cantar victoria, pero cuando el guardián se reincorporó, estaba aferrando el mango de la espada con su cola rayada…
-¡No es justo!-
-Pero vamos, no pensabas que sería así de fácil ¿O sí?-rio Feline, para luego tomar de su cintura la pequeña bolsa que despedía una energía extraña-Y ya que quieres mostrar tus juguetes…-
-¿Qué es eso…?-preguntó Keidis, de repente temeroso de haber provocado que Feline mostrara su verdadero poder…
-Este pequeño souvenir solía ser de uno de los soldados de la Plotomea que se atrevió a retarme, y hace cosas…-Feline metió su mano en la pequeña bolsa, y la sacó sosteniendo una enorme escopeta…-como esta…-
Feline disparó al sorprendido Keidis, quien apenas reaccionó cuando las balas pasaron rozándolo, estaba tremendamente sorprendido, pero no terminó ahí, Feline metió la escopeta en la bolsa y sacó una ballesta con un cargador circular repleto de flechas, seguía disparando a Keidis, quien se teletransportaba de un lugar a otro, buscando un punto ciego en los sentidos gatunos de su oponente, quería acercarse a su oponente, pero hacerlo sin terminar con agujeros se veía imposible…
-Apenas estamos empezando…-Feline guardó la ballesta y sacó un enorme lanzagranadas, que sostenía con una sola mano, mientras provocaba a Keidis, agitando la cola con la que aún sostenía su espada…-Es hora del show…-
Feline comenzó a disparar una y otra vez, mientras Keidis le disparaba a cada granada que veía venir hacia él, si bien la munición podía acabarse, segur usando sus habilidades y terminar agotado era más peligroso…
Al final, la munición de Feline se agotó, pero eso no iba a terminar el encuentro. El guardián volvió a atar la bolsa a su cintura y tomó la espada con su mano, esperando el siguiente movimiento de Keidis, observándolo con esos ojos infernalmente ardientes…
-Esto es muy decepcionante para un demonio de tu reputación… aunque no sea mucho comparado con la de tu hermano…-Keidis se enfureció al escuchar que nombraban a Karasu, menospreciándolo como si fuera un insecto, por lo que volvió a atacar a su oponente con ferocidad, Feline se reía con cada nuevo golpe, lo cual provocaba más aún a Keidis, en cierto momento, la espada del cazador sobrepasó la defensa de Feline, poniéndola cerca de su cuello, y sonriendo al ver la victoria…
-Entrégamela, o estás acabado…-dijo Keidis, regocijándose ante su oponente…
-Muy bien, tu plan se ve muy sólido…-dijo Feline, para luego señalar a espaldas de Keidis y comentar…-excepto por el galán detrás de ti…-
Keidis miró y vio a otro Feline, recargado despreocupadamente contra la puerta a su objetivo, pero no era todo, había dos más jugando vencidas en el escritorio del guardián, otro más saludando a los sorprendidos miembros del equipo de Keidis, otro comiendo una nueva rebanada de pastel, y unos últimos tres doblándose de la risa al ver la expresión del cazador al ver a todas las réplicas…
-¿Qué es esto…?-se preguntó Keidis…
-Estas son…-
-¡Las Nueve Sombras del Gato Negro!-dijeron al unísono, Keidis se quedó perplejo al darse cuenta de que no solo implicaba que tenía que cuidarse de múltiples ataques, sino que no sabía cual era la espada que estaba buscando…
-No puede ser…-
-¿Qué no? Pregúntale a él…-replicó uno, señalando a la réplica a su lado-O a él…-
-O a este tipo…-
-O tal vez a él…-
Keidis pensó en que momento había perdido la cordura, sin encontrar muchas opciones, tomó su pistola y empuño su espada, comenzó a disparar y atacar a cada uno de ellos, pero se movían con agilidad y gracia, esquivando sus ataques sin problema alguno…
-Oye, es hábil ¿No?-comentó una réplica a Jinn, antes de esquivar una bala en su dirección, Keidis se desesperó cuando todas las copias comenzaron a darle patadas y golpes una y otra vez, sin que pudiera defenderse, los golpes caían como lluvia sobre el cazador, quien estando tan aturdido, ni siquiera podía reaccionar ante ellos…
Las copias desparecieron repentinamente cuando Feline vio que Keidis había logrado tomar una espada de alguna réplica cercana, sin embargo, esa no era la correcta, por lo que el reto continuaba, aún así, Feline estaba impresionado al ver que había tenido el tiempo para arrebatarle el arma a tal velocidad…
-No está mal, novato-dijo Feline, girando la espada entre sus dedos-pero estás jugando con los mayores, no lo olvides…-
-¿Qué tiene eso que ver con la pelea?-preguntó Keidis, aún exasperado por haber sido subestimado…
-Tiene todo que ver, una pelea no se desarrolla solo por que quieres tenerla, si combates de esa forma, estás muerto…-replicó Feline, mientras miraba con aire de superioridad al cazador…
-¿Vienes a darme consejos, o pelearás en serio?-replicó Keidis, con impaciencia…
-Bien, entonces veamos como te defiendes de esto…-Los ojos de Feline brillaron intensamente mientras levantaba su mano al techo, y pronunciaba palabras en un lenguaje extraño…
-Conjuro de Nueve Vidas-Una espesa neblina se soltó de repente, cargada de una oscuridad aterradora, no pasó mucho tiempo antes de que Keidis se viera rodeado y sin capacidad de ver a través de la espesa niebla…
-Por buena visión que tengas, no te ayudará…-reía la voz de Feline desde algún lugar entre la bruma…-esta nube de niebla incrementa todas mis capacidades, lo cual no está bien para ti…-
-Si eso es cierto o no, lo averiguaré a mi manera-respondió Keidis, tratando de agudizar todos sus sentidos para encontrar a la muerte en su juego del escondite…
Pero no pasó mucho tiempo antes de que Feline apareciera, atacando de forma relampagueante con su espada, Keidis no podía ver más allá de su nariz, y mucho menos advertir cuando el guardián de las trece puertas aparecía desde cualquier ángulo y lo atacaba inesperadamente…
“Tengo que salir de aquí…” Pensó Keidis, al tiempo que se teletransportaba a otro lugar para evitar que Feline pudiera ubicarlo…
-No te servirá…-clamó Feline, mientras aparecía tras Keidis y lo pateaba contra el suelo, obviamente el guardián había descubierto el punto débil de su técnica, y no conforme con eso, la niebla era tan espesa que no había manera de disiparla…
¿O sí…?
-Veamos si anticipas esto…-dijo Keidis, antes de volver a desaparecer en la niebla…
-Si no funciona una vez, no vuelvas a hacerlo…-replicó Feline, antes de lanzarse al lugar donde había ubicado a su oponente…
Feline agitó su espada contra Keidis, pero antes de tocarlo, el demonio cazador sacó una bomba de su cinturón y la puso frente a la cuchilla del guardián antes de desaparecer de nuevo…
La explosión repelió a Feline y disipó la neblina sin dejar rastro…
-No viste eso venir ¿o sí?-se burló Keidis, pero la alegría desapareció cuando Feline se levantó, sacudiéndose el polvo de la ropa, al parecer, no le había causado ningún daño…
-¿Un juego?-preguntó Keidis, perplejo ante la propuesta…
-¿Eres sordo? ¿O estúpido? ¡Sí, un juego, retrasado!-exclamó el guardián, haciendo que Keidis enfureciera, pero antes de que se abalanzara sobre Feline, Arnes recordó algo…
-¿No era que no se puede abrir una puerta si no te derrotamos?-preguntó al guardián, quien lo miró con sagacidad felina para luego responder.
-No tengo este trabajo solo por el lindo escritorio…que por cierto, no esta nada mal-respondió con sarcasmo-al guardián de las trece puertas se le concede una serie de ventajas, así que yo decido quien pasa y quien no…-
-Bien, entonces ¿Cuál es el reto?-preguntó Keidis, impaciente por pelear.
El guardián se acercó a su escritorio, se agachó y reapareció con un enorme y bizarro lanzamisiles…
-Te disparo con esto en la cara, y si sobrevives, pueden pasar…-la reacción del grupo fue muy predecible, y Feline se echó a reír sonoramente ante esto-¡Jajaja ja! ¡Debieron ver sus caras, no tiene precio!
-¡Tómalo en serio de una vez!-gritaron todos al unísono.
-¡De acuerdo, de acuerdo! ¡Que mal humor!-Feline lo pensó un momento, desenvainó su espada y dijo-Muy bien, si logras quitarme esta espada, entonces pasarán sin que se los impida…-
-¿Eso es todo? No puede ser tan difícil-clamó Keidis, lo que provocó la risa de Feline…
-Si lo logras, la puerta que buscan es la de ahí…-señaló Feline a una puerta unos pasos a su izquierda, Keidis atacó a Feline, pero este se movió muy rápido, sin que pudiera tocarlo, pero además, hizo a Keidis perder el equilibrio, haciéndolo caer al suelo…
-No he dicho que puedes comenzar…-replicó Feline, su oponente se levantó del suelo, esperando a que se preparara a comenzar, Feline lo miró de forma burlona y esperó un momento, luego, levantó su mano y dijo:
-Comencemos…-dijo, y los dos comenzaron a atacar con sus espadas a velocidad de relámpago, Keidis hacía todo lo posible por quitarle la espada a intervalos, pero Feline estaba obviamente jugando con él, no sería nada fácil quitarle el arma que movía a tanta velocidad…
-¡Tormenta de Acero!-Keidis comenzó a atacar con velocidad, pero Feline lo contrarrestó rápidamente…
-¡Ráfaga de Tigre!-La espada de Feline rebasó fácilmente la velocidad de Keidis, pero no lo golpeó ni una vez, sin embargo, si lo hizo perder el balance, momento que el guardián aprovechó para golpearlo y derribarlo, nadie tenía que decirle a Keidis que Feline solo estaba jugando con él.
-No veo como es que pasó por tu mente venir hasta acá…-se burló Feline…-uno diría que hasta un gatito puede vencerte…-
-¡Cierra la boca! ¡Aún no termino!-replicó Keidis, volviendo al ataque con agilidad, pero todo parecía no tener sentido…
Keidis se precipitó y atacó fuertemente al guardián, pero este esquivó y viendo el hueco que Keidis dejó, intentó golpearlo, el demonio cazador se movió a un lado, sosteniendo la espada de Feline bajo su brazo y disparando la pistola que había sacado con velocidad, Feline esquivó la bala, y Keidis estuvo a punto de cantar victoria, pero cuando el guardián se reincorporó, estaba aferrando el mango de la espada con su cola rayada…
-¡No es justo!-
-Pero vamos, no pensabas que sería así de fácil ¿O sí?-rio Feline, para luego tomar de su cintura la pequeña bolsa que despedía una energía extraña-Y ya que quieres mostrar tus juguetes…-
-¿Qué es eso…?-preguntó Keidis, de repente temeroso de haber provocado que Feline mostrara su verdadero poder…
-Este pequeño souvenir solía ser de uno de los soldados de la Plotomea que se atrevió a retarme, y hace cosas…-Feline metió su mano en la pequeña bolsa, y la sacó sosteniendo una enorme escopeta…-como esta…-
Feline disparó al sorprendido Keidis, quien apenas reaccionó cuando las balas pasaron rozándolo, estaba tremendamente sorprendido, pero no terminó ahí, Feline metió la escopeta en la bolsa y sacó una ballesta con un cargador circular repleto de flechas, seguía disparando a Keidis, quien se teletransportaba de un lugar a otro, buscando un punto ciego en los sentidos gatunos de su oponente, quería acercarse a su oponente, pero hacerlo sin terminar con agujeros se veía imposible…
-Apenas estamos empezando…-Feline guardó la ballesta y sacó un enorme lanzagranadas, que sostenía con una sola mano, mientras provocaba a Keidis, agitando la cola con la que aún sostenía su espada…-Es hora del show…-
Feline comenzó a disparar una y otra vez, mientras Keidis le disparaba a cada granada que veía venir hacia él, si bien la munición podía acabarse, segur usando sus habilidades y terminar agotado era más peligroso…
Al final, la munición de Feline se agotó, pero eso no iba a terminar el encuentro. El guardián volvió a atar la bolsa a su cintura y tomó la espada con su mano, esperando el siguiente movimiento de Keidis, observándolo con esos ojos infernalmente ardientes…
-Esto es muy decepcionante para un demonio de tu reputación… aunque no sea mucho comparado con la de tu hermano…-Keidis se enfureció al escuchar que nombraban a Karasu, menospreciándolo como si fuera un insecto, por lo que volvió a atacar a su oponente con ferocidad, Feline se reía con cada nuevo golpe, lo cual provocaba más aún a Keidis, en cierto momento, la espada del cazador sobrepasó la defensa de Feline, poniéndola cerca de su cuello, y sonriendo al ver la victoria…
-Entrégamela, o estás acabado…-dijo Keidis, regocijándose ante su oponente…
-Muy bien, tu plan se ve muy sólido…-dijo Feline, para luego señalar a espaldas de Keidis y comentar…-excepto por el galán detrás de ti…-
Keidis miró y vio a otro Feline, recargado despreocupadamente contra la puerta a su objetivo, pero no era todo, había dos más jugando vencidas en el escritorio del guardián, otro más saludando a los sorprendidos miembros del equipo de Keidis, otro comiendo una nueva rebanada de pastel, y unos últimos tres doblándose de la risa al ver la expresión del cazador al ver a todas las réplicas…
-¿Qué es esto…?-se preguntó Keidis…
-Estas son…-
-¡Las Nueve Sombras del Gato Negro!-dijeron al unísono, Keidis se quedó perplejo al darse cuenta de que no solo implicaba que tenía que cuidarse de múltiples ataques, sino que no sabía cual era la espada que estaba buscando…
-No puede ser…-
-¿Qué no? Pregúntale a él…-replicó uno, señalando a la réplica a su lado-O a él…-
-O a este tipo…-
-O tal vez a él…-
Keidis pensó en que momento había perdido la cordura, sin encontrar muchas opciones, tomó su pistola y empuño su espada, comenzó a disparar y atacar a cada uno de ellos, pero se movían con agilidad y gracia, esquivando sus ataques sin problema alguno…
-Oye, es hábil ¿No?-comentó una réplica a Jinn, antes de esquivar una bala en su dirección, Keidis se desesperó cuando todas las copias comenzaron a darle patadas y golpes una y otra vez, sin que pudiera defenderse, los golpes caían como lluvia sobre el cazador, quien estando tan aturdido, ni siquiera podía reaccionar ante ellos…
Las copias desparecieron repentinamente cuando Feline vio que Keidis había logrado tomar una espada de alguna réplica cercana, sin embargo, esa no era la correcta, por lo que el reto continuaba, aún así, Feline estaba impresionado al ver que había tenido el tiempo para arrebatarle el arma a tal velocidad…
-No está mal, novato-dijo Feline, girando la espada entre sus dedos-pero estás jugando con los mayores, no lo olvides…-
-¿Qué tiene eso que ver con la pelea?-preguntó Keidis, aún exasperado por haber sido subestimado…
-Tiene todo que ver, una pelea no se desarrolla solo por que quieres tenerla, si combates de esa forma, estás muerto…-replicó Feline, mientras miraba con aire de superioridad al cazador…
-¿Vienes a darme consejos, o pelearás en serio?-replicó Keidis, con impaciencia…
-Bien, entonces veamos como te defiendes de esto…-Los ojos de Feline brillaron intensamente mientras levantaba su mano al techo, y pronunciaba palabras en un lenguaje extraño…
-Conjuro de Nueve Vidas-Una espesa neblina se soltó de repente, cargada de una oscuridad aterradora, no pasó mucho tiempo antes de que Keidis se viera rodeado y sin capacidad de ver a través de la espesa niebla…
-Por buena visión que tengas, no te ayudará…-reía la voz de Feline desde algún lugar entre la bruma…-esta nube de niebla incrementa todas mis capacidades, lo cual no está bien para ti…-
-Si eso es cierto o no, lo averiguaré a mi manera-respondió Keidis, tratando de agudizar todos sus sentidos para encontrar a la muerte en su juego del escondite…
Pero no pasó mucho tiempo antes de que Feline apareciera, atacando de forma relampagueante con su espada, Keidis no podía ver más allá de su nariz, y mucho menos advertir cuando el guardián de las trece puertas aparecía desde cualquier ángulo y lo atacaba inesperadamente…
“Tengo que salir de aquí…” Pensó Keidis, al tiempo que se teletransportaba a otro lugar para evitar que Feline pudiera ubicarlo…
-No te servirá…-clamó Feline, mientras aparecía tras Keidis y lo pateaba contra el suelo, obviamente el guardián había descubierto el punto débil de su técnica, y no conforme con eso, la niebla era tan espesa que no había manera de disiparla…
¿O sí…?
-Veamos si anticipas esto…-dijo Keidis, antes de volver a desaparecer en la niebla…
-Si no funciona una vez, no vuelvas a hacerlo…-replicó Feline, antes de lanzarse al lugar donde había ubicado a su oponente…
Feline agitó su espada contra Keidis, pero antes de tocarlo, el demonio cazador sacó una bomba de su cinturón y la puso frente a la cuchilla del guardián antes de desaparecer de nuevo…
La explosión repelió a Feline y disipó la neblina sin dejar rastro…
-No viste eso venir ¿o sí?-se burló Keidis, pero la alegría desapareció cuando Feline se levantó, sacudiéndose el polvo de la ropa, al parecer, no le había causado ningún daño…
Última edición por Devil Arnes el Jue Oct 08, 2009 7:28 pm, editado 2 veces
Jinn de helios- Cantidad de envíos : 59
Fecha de inscripción : 22/02/2008
Página 1 de 1.
Permisos de este foro:
No puedes responder a temas en este foro.